Los datos recogidos por el Ministerio de Industria con respecto al comercio electrónico en España, revelan la tendencia alcista del mismo, con un especial incremento de las compras desde terminales móviles.

El e-commerce en España alcanzó una facturación de 14.600 millones durante 2013, un 18% más que en 2012, y se estima que llegará a los 17.000 millones en 2014, lo que supondría un crecimiento del 18-20% con respecto al ejercicio anterior.

Así lo revelan los datos del ‘Estudio sobre Comercio Electrónico B2C 2013′, elaborado por el Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información (ONTSI) del Ministerio de Industria, presentado recientemente en el marco del EEC 2014 celebrado en Bilbao.

El informe constata que el comercio electrónico B2C sigue en expansión, además de evidenciar la tendencia alcista que el sector experimenta en España. Además, la financiación pública para apoyar a los emprendedores del sector, así como el potencial futuro del mismo, representan una gran oportunidad para las empresas que quieran expandir su negocio on-line.

En concreto, en 2007, el B2C alcanzó los 5.911 millones y en 2013 se elevó a 14.600 millones, un 18% más que en 2012, año en el que ya se había un registrado un crecimiento del 13,4% respecto a 2011.

Por otro lado, en el informe se apunta que el número de internautas compradores ha pasado de 15,2 millones en 2012 a 17,2 millones en 2013, con un incremento del 14% en valores absolutos.

El gasto medio creció en 2013 un 3,9%, situándose en 848 euros, frente a los 816 euros de 2012. Una de las razones que explican la expansión del comercio electrónico es el aumento de la población internauta, que se eleva a 28,4 millones y representa el 73,1% de la población española mayor de los 15 años, lo que supone un 3,2% más que en 2012.

Perfil del consumidor

Respecto al perfil del consumidor medio, el informe lo establece en el de una persona de 25 a 49 años y residente en áreas urbanas con más de 100.000 habitantes. Por el contrario, los que menos compras realizan son las personas del ámbito rural, con rentas más bajas y mayores de 65 años.

Un 14,9% de los internautas compradores adquiere productos mensualmente y la mayor parte de las compras oscilan entre los 250 y los 3.000 euros al año. El hogar sigue siendo el lugar preferido para realizar las compras on-line, con el 92,3%, y, por primera vez, se prefiere comprar en movilidad, un 4,4%, que desde el puesto de trabajo, 3,3%.

Otro de los datos que recoge el documento es que más de cuatro millones de personas utilizaron un dispositivo móvil o tablet para realizar sus compras, lo que supone un aumento del 13,8% respecto al año anterior.

Entre los que usaron móviles o tabletas para realizar compras, un 68,1% considera que estos dispositivos son adecuados para hacerlo, frente a un 6,3% que cree que no lo son.

Principales tiendas on-line Los sitios web que venden principalmente por internet se sitúan como principal canal de compra (52,6%), le siguen las empresas que combinan tienda física y virtual (39,3%) y las webs de fabricante (35,5%).

Por otra parte, las tarjetas de crédito y débito siguen siendo la forma de pago preferida para hacer la compra (52,8%), aunque desciende un 10,1% con respecto a 2012. Por otro lado, aumenta un 13,5% la utilización de plataformas de pago exclusivamente electrónico, empleadas en el 28,4% de las transacciones.

Las modalidades de pago menos utilizadas son la domiciliación bancaria y el pago contrareembolso (17,1%), así como otras vías de pago (1,6%) y el teléfono móvil, que representa sólo el 0,2% de las transacciones.

Retos del e-commerce

El estudio también indica que el 88,9% de los compradores no ha tenido incidencias, frente a un 11,1% señala que sí las ha experimentado, un porcentaje que ha aumentado durante este año.

Entre los usuarios que aseguran haberlas tenido, un 26,4% apuntan a envíos defectuosos, un 26,1% a la no recepción del producto y un 11,6% al retraso en la entrega.

Entre las razones para realizar las compras on-line se encuentran el tiempo y la comodidad (60,9%) y el precio (38,6%), mientras que entre las causas para no recurrir a este sistema un 74,5% prefiere ver el producto en la tienda, además de un 45,3% que han señalado la desconfianza en términos de seguridad que les genera el medio.

Leíedo en Cadenadesuministro.es, 24 de Noviembre de 2014